Historias Exitosas *
*Nota: Se trata de una experiencia personal. Los resultados en la pérdida de peso pueden variar de persona a persona.

SYLVIA PEREYRA
Mi nombre es Yoli, tengo 63 años y comencé con este plan a mediados de agosto
del 2003 con 98 kg. A fines de ese año, había bajado los 15 Kg. que me había
propuesto como primera meta.
En enero de 2004 estuve de vacaciones, como había adelgazado y creí que las
sabía todas volví con algunos Kg. de más, nunca supe cuántos porque cambié
de balanza y esta no funcionaba bien.
Renové enseguida la suscripción a Dietas Cormillot pero en el 2004 se me
extirpó la tiroides y estuve un tiempo con el metabolismo alterado. Hasta que
no recibí la cantidad de medicación justa y mejoró mi estado general, la Dra.
no me autorizó a hacer pileta. Ahora ya estoy mejor.
Actualmente peso 90.6 Kg., sigo renovando la suscripción cada tres meses, sé
por experiencia que ésta es la única vía para adelgazar sin drogas, he
aprendido y sigo aprendiendo en cada chat o mail educativo y con el contacto
de otras personas que están en mi misma situación.
He tomado conciencia que debo planificar lo que voy a almorzar y cenar en la
semana ni bien recibo el plan de comidas semanal. También hacer una planilla
con lo que como y llevar un control diario de la cantidad de vasos con agua
que ingiero. Todavía me falta controlar el tamaño de las porciones que
consumo. Pero, cada vez que cumplo con estos pasos, la balanza retrocede.
Además de verse mi mejoría en el peso, mis análisis clínicos dan excelentes,
nada de colesterol, valores normales de presión arterial y glucemia y además
he recuperado un 1,04% de masa ósea a nivel lumbar.
Si bien para la osteoporosis tomo medicación, me ha dicho la Dra. que el
ejercicio que hago (comencé tímidamente con 40 minutos de pileta 3 veces por
semana y actualmente hago 1 hora y 10 minutos, cinco veces a la semana) ha
contribuido grandemente a eso.
Para finalizar agrego que:
Se puede, sí que se puede, pero todo va a depender de nosotros y de cómo aceptemos las manos que tan generosamente se nos extienden.